Dime tú...

Podemos ser abiertos de mente o decirlo como he escuchado mucho últimamente, pero ¿qué tan abiertos somos al momento de permitirme a "YO" vivir? Somos decepcionantemente cerrados en todo. Nos molesta que nos digan la verdad por más cierta que sea y por más qué pidamos que no las digan; Nos molesta las opiniones diferentes, porque ciertamente somos engreídos "mi opinión es más acertada que la tuya"; Nos molesta la gente tan cerrada como nosotros y este es el punto más irónico, vemos nuestros defectos reflejados en los demás pero según "YO" para ellos esta mal, pero para mi no, oh, que "YO" tan crecido. Tal refrán "Dime de que presumes y te diré de qué careces" nos queda perfecto a muchos, no es presumir que tan inteligente eres, si lo eres solo se tú y sin decir ni una sola palabra todos los notaran, eso es de personas verdaderamente inteligentes, no esta mal presumir tus logros pero si, vivir de ello. La sociedad actual se caracteriza por ubicarnos en la época donde más existe el libertinaje, más "mentes abiertas" a experiencias a nuevas, de cierta manera es verdad, lo que hoy muchos hacemos hace 50 años (digo yo) no estaba permitido por diferentes tabús y es cierto, en dicha época que vivimos pero es tan real lo qué dicen,  yo lo veo de esta manera:
Vivimos en una actual sociedad que se acostumbra, que lo acepta porque "que más" o "me da igual", "no me esta pasando a mi ni a mi familia, así que no me importa", entonces, ¿estamos siendo "mentes abiertas a lo nuevo" o "indiferentes"? Sin caer religiones, ni partidos políticos, me baso en la conducta humana que podemos ver al salir de nuestras casas, no habitamos un mundo lleno de mentes abiertas, habitamos un mundo de mentes conformistas, adaptables, moldeables, ¿Por qué hace 50 años no se permitía lo de hoy? Porque a la gente si le interesaba, se preocupa por dar opinión propia, por alzar la mano si no me gusta ni lo acepto, eran posiblemente mentes mucho más emprendedoras que las de la actualidad. Nos adaptamos a lo que nos toca hoy, mañana y pasado, pero si no nos gusta ¿qué hacemos? Posiblemente nada, probablemente nos quejamos y somos infelices con aquello pero ¿lo cambiamos? No! y ahí radica todo esto,
¿Somos mentes abiertas  o mentes conformistas?